Caballos leyenda: Ten Thirty

Sin duda, si hay alguien a quien reconocer en México como criadores de los mejores caballos cuarto de milla de la industria internacional es al Rancho El Fortín, pues son sobrados los méritos que han logrado en colas, cala, reining, entre otras disciplinas.

En casi cuatro décadas de trayectoria, han sido muchos los caballos sobresalientes, pero hoy relataré una de las historias más relevantes que conozco de sus caballos.

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Desde hace hacía varios años, Aldo, el hijo menor de la familia Ramón Aguirre, había estado buscando con algunos potrillos llegar a ganar el máximo logro de los caballos tresañeros de reining, quedando muy cerca de lograrlo.

Lo anterior, después de que en México ya los habían obtenido en la charrería en las suertes de colas y cala, pero estaba esa asignatura pendiente y les había pedido a varios de los grandes entrenadores de Estados Unidos que cuando encontraran un caballo con potencial, se lo hicieran saber.

Un día recibe una llamada de Casey Deary diciéndole que posiblemente tenía el caballo que estaba buscando, después de ver algunos videos, había quedado impresionado de la manera de parar, pero también del costo que tenía con relación a lo que había estado buscando.

Luego de analizar el proyecto, decide tomar el riesgo y cuando estaba a punto de comunicárselo a Casey, sintió la necesidad de comunicárselo a sus hermanos e invitarlos a participar, como seguramente su padre lo hubiera hecho en vida.

Después de discutir los riesgos, todos aceptaron entrar al proyecto que tenía más posibilidades de fracaso que de éxito por la probabilidad entre varios cientos de caballos que entran al mismo proceso de selección y competencia cada año.

Realmente el caballo había sido concebido para llegar a lo grande y por ello había sido ofertado a la venta de la subasta del futurity NRHA de añero y fue de ahí de dónde surgió su nombre de referencia por el turno 10/30 que tuvo en la misma, sin pensar que ese sería el popular nombre que lo ha hecho mundialmente famoso en la disciplina del reining.

El caballo fue adquirido y llevado a Casey para iniciar su entrenamiento por los dueños del famoso “Maverick”, sin embargo, se ocupaba dinero para hacer la campaña publicitaria que este último necesitaba y una manera era vendiendo su nuevo proyecto y se lo hicieron saber a su entrenador.

Casey sabedor del encargo que le había hecho Aldo, decidió comunicárselo, la única condición que pedía para la venta era que se lo dejara para meterlo él al evento y todos estuvieron de acuerdo.

Realmente era un caballo sobresaliente y la prueba fue que en la primera ronda recibieron una oferta económica considerable por el potro que Aldo no sabía si comunicarla a la sociedad de hermanos para no sembrar dudas y una noche antes de la final, llegó otra oferta millonaria que realmente no se podía dejar ir, pues si el caballo no ganaba el evento, posiblemente su valor no sería ni lo que había costado.

Sin embargo, todos decidieron jugar esa carta con el resultado que ya conocemos, campeón del Futurity NRHA 2021. Comenta Aldo que es indescriptible la emoción del día de la competencia, en lo personal, familiar y deportivo, las llamadas y mensajes de felicitación de todas partes, pues era la primera vez que un caballo de mexicano lo lograba.

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Su corta carrera deportiva fue exitosa en dinero ganado, más de $420, 000 dólares, pero no como pudo llegar a ser por una lesión que lo retiró a temprana edad de las pistas, pues le quedaban fácilmente dos años por competir.

No cabe duda que Ten Thirty estaba elegido para ser campeón y ahora como semental con la esperanza de transmitir a su descendencia su mansedumbre y concentración que lo han caracterizado para competir, pues difícilmente se le escuchaba un relincho o una distracción durante las competencias.

Sin duda, para la familia Ramón es uno de sus orgullos después de tantos años de esfuerzo y dedicación, tanto en la rienda americana como en la charrería, pues no cabe duda que los mejores años están por venir.